Todo gobierno esta detenido viendo el partido de futbol.
Las calles son una gigantesca voz que al unisono sincroniza televisores y radios, me he dado una vuelta por la catedral aprovechando la total ausencia de autoridades, los cafés no han llenado como esperaban, solo algunos parroquianos instalados y algunos indiferentes.
Mi compañero se emociona como si en ello le fuera la vida, me narra TODO el partido y hago como que me interesa.
Ya casi termino de bajar lo que necesitaba
No hay comentarios:
Publicar un comentario